Una de las preguntas que nos hacemos cuando adquirimos o pensamos en adquirir una caldera es la del tipo de combustible a utilizar. Aunque también existen las calderas eléctricas, hoy vamos a hablar de la elección entre gas natural o gas butano. ¿Cuál es mejor para una vivienda?
Qué elegir: gas natural o gas butano
Las opciones que se nos presentan cuando instalamos una caldera en casa son varias. Además del tipo de caldera en sí, de la potencia o el tamaño, se nos plantea la elección acerca del suministro. En algunas viviendas, no existe alternativa, pero en otras, podemos elegir entre gas natural o gas butano para ahorrar.
Antes de conocer las diferencias entre uno y otro o su adecuación para cada tipo de vivienda, vamos a ver el funcionamiento de cada uno de ellos, así como sus características particulares. Esto nos ayudará a entender cuál se adapta más a nuestras necesidades.
Calderas de gas butano o propano
Como decíamos, lo primero que vamos a ver antes de hablar de gas natural o gas butano es cómo funcionan ambos. El gas butano y el propano vienen envasados en bombonas, y son las tradicionales que un camión entrega en los domicilios. No obstante, el propano tiene también otros formatos. Tanto uno como otro son gases licuados del petróleo (GLP), así que son muy contaminantes.
El principal inconveniente del butano es que a temperaturas muy bajas, puede dejar de funcionar. Si el consumo es elevado, resulta más adecuado utilizar propano, ya que gasifica mejor. Para diferenciarlas, tendremos que buscar una banda negra en su envase. Por el contrario, el gas butano tiene mayor poder calorífero así como autonomía. Además, la bombona pesa menos. En lo que respecta al precio, ambos valen lo mismo.
Calderas de gas natural
Para conocer si es mejor una caldera de gas natural o gas butano, nos queda conocer qué es el primero de ellos. Se trata de un hidrocarburo que se obtiene de la mezcla de gases de origen natural que son ligeros. Entre ellos encontramos metano, nitrógeno, dióxido de carbono, etc.
El gas natural se forma con la descomposición de varias capas de plantas y materia animal. Estas son expuestas a presión y calor de gran intensidad debajo de la superficie de la Tierra. Es un proceso que lleva millones de años.
Aunque su combustión resulta menos dañina que la de otros combustibles fósiles, también produce gases de efecto invernadero que dañan al medio ambiente.
Diferencias en los consumos de gas natural o gas butano
Si hacemos una comparativa del consumo para decantarnos por gas natural o gas butano, podemos decir que el natural resulta más eficiente. La principal ventaja de este la encontramos también en el propio suministro, que es ininterrumpido. Con el gas butano, en cambio, dependemos de poder disponer de una bombona nueva.
Hay que tener en cuenta en cualquier caso, que si queremos utilizar el gas natural en un piso, la instalación debe ser central en el edificio. Además, habrá que pagar el impuesto correspondiente por el hidrocarburo. La ventaja del gas butano es que tenemos un mayor control sobre nuestro consumo, pero con el inconveniente de que la bombona debemos cambiarla nosotros mismos.
Si debemos elegir entre gas natural o gas butano, el primero se recomienda cuando el consumo va a ser mayor. Esto es, tenemos necesidades altas de calefacción y agua caliente sanitaria. Si se trata de una sola persona y las temperaturas no son excesivamente frías, el butano será nuestra opción.