La calefacción en invierno es una obligación en muchísimas casas. Aunque su funcionamiento es sencillo, debemos conocer cómo y cuándo conectarla. Si la temperatura de tu hogar no es siempre la que deseas, quizás estás cometiendo alguno de los errores comunes con la calefacción de los que te vamos a contar. En el caso de que algunos de ellos te resulten familiares, te explicamos aquí mismo cómo evitarlos.
Los errores comunes con la calefacción
Conectar la calefacción en casa es muy sencillo. Basta con darle al botón de encender y apagar cuando consideremos que la casa ya está caliente y se mantendrá así. ¿Nos suena? Probablemente sí.
Sin embargo, para utilizar estos artefactos correctamente debemos tener en cuenta algunos aspectos. De lo contrario, cometeremos los errores comunes con la calefacción que además de restar confort en nuestro hogar, elevan nuestras facturas. Os los dejamos a continuación.
Misma temperatura en toda la vivienda
Uno de los errores comunes con la calefacción consiste en no regular cada artefacto de manera individual. Si disponemos de termostatos y válvulas para cada radiador, debemos ajustar la temperatura de cada uno a las necesidades de dicha estancia.
Así, por ejemplo, la temperatura en el salón debe ser diferente a la de los dormitorios. O también, aquellas habitaciones que se encuentran vacías no tienen por qué tener la calefacción funcionando. Como ayuda para mantener el calor, debemos cerrar las puertas y las ventanas y así contribuir a que la temperatura se eleve con mayor rapidez.
Encender la calefacción demasiado tarde
Otro de los errores comunes con la calefacción es el de esperar a que sea demasiado tarde. Cuando la temperatura ambiente es muy fría, habrá que esperar más tiempo para que esta se eleve. Si por el contrario nos adelantamos y encendemos la calefacción cuando empezamos a notar calor, podremos conectarla durante menos tiempo y a una temperatura más baja.
Hay que tener en cuenta que por cada grado que subimos la temperatura por encima de los 21º, estamos aumentando el consumo alrededor de un 7% por cada grado. Una pequeña diferencia en la temperatura que se vuelve muy grande en las facturas.
En la actualidad podemos encontrar termostatos que nos permiten encender apagar la calefacción con nuestro teléfono móvil estando fuera de casa. De esta manera, podremos programarla para mantener una temperatura estable en la vivienda.
No controlar el aislamiento
A veces notamos que la calefacción no rinde como debería. Parece que algunas zonas de la casa están más frías mientras que otras se mantienen calientes. ¿Hemos prestado atención al aislamiento? Aunque cueste creerlo, las rendijas en las ventajas o las puertas mal selladas son suficiente para descender la temperatura ambiente. Aunque quizás no nos hayamos dado cuenta, este es otro de los errores más comunes con la calefacción.
Descontrol sobre las horas de consumo
El último de los errores comunes con la calefacción hace referencia al tiempo que esta permanece encendida o apagada. Antes mencionábamos lo desagradable que es llegar a casa y encontrar la vivienda fría, pero también lo es despertarnos por la mañana y notar el aire reseco y tener incluso dolor de cabeza.
Por las noches no es necesario mantener la calefacción. Una temperatura de 17º es adecuada para los dormitorios. Simplemente debemos cerrar la habitación y dejar conectada la calefacción durante un rato antes de irnos a dormir. Para evitar pasar frío por la mañana, bastará con programarla para que se encienda una hora antes de que suene el despertador.