Si estás barajando la idea de comprar un calentador de agua eléctrico y no te decides, vamos a darte algunos consejos. Si piensas en comprar un calentador de agua eléctrico, vas a encontrar algunos con muy buen precio y condiciones de mantenimiento, además de las pertinentes garantías. Se recomienda que la garantía del termo no sea menor a dos años. De hecho, es algo que varias marcas ofrecen. No vamos a posicionarnos sobre si es mejor un calentador a gas o un termo eléctrico. Eso depende de las condiciones, los requisitos y las instalaciones que tenga cada uno.
¿Cómo funciona un calentador de agua eléctrico?
Un termo eléctrico dispone de un tanque de agua. Puedes encontrar capacidades que oscilan entre los 50 y los 100 litros (la elección depende de tus necesidades). Dentro del tanque se encuentra una resistencia eléctrica que, cuando se activa, calienta el agua: así de simple. Gracias a los materiales aislantes de los que está construido el tanque se mantiene el agua caliente en su interior. Es decir, hace la misma función que un termo cuando guardas el café dentro.
Si se da la circunstancia de que pasa mucho tiempo y el agua se enfría, unos sensores automatizan la activación de la resistencia, y esta procede a calentar el agua de nuevo. Es cierto que no calienta el agua a la misma rapidez que los calentadores a gas. Por eso, en una vivienda donde se hace un uso de grandes cantidades de agua caliente en poco espacio de tiempo, quizás sea insuficiente.
¿Qué ventajas y qué desventajas tiene un termo eléctrico?
Un calentador de agua eléctrico suele ocupar más espacio que un calentador a gas. Si tienes poco espacio, piénsalo. También es cierto que con los termos eléctricos te ahorras hacer la instalación de gas, ya que solo necesitas poder conectarlos a la corriente. Con los termos eléctricos el agua sale caliente de inmediato. No hay que esperar. Además, su tecnología los hace aptos para cualquier tipo de caudal, haya o no mucho agua a presión, y la temperatura del agua siempre es la misma. No sale caudal frío que pueda sorprenderte en la ducha.
Una de las desventajas es que el agua sale caliente siempre que no se termine el agua del termo. Si lo hace, será necesario esperar a que vuelva a llenarse para tener agua caliente otra vez. También con los tanques eléctricos la factura de la luz puede ser más cara, ya que la energía eléctrica no es precisamente barata. También existen calentadores instantáneos eléctricos pero no son recomendables porque su consumo es muy elevado, ya que necesitan una potencia eléctrica muy alta.
Compra tu calentador de agua eléctrico según tus opciones
Como ya se ha dicho, ningún sistema es mejor que el otro. Sí hay que tener claro que, si se trata de una casa en la que vive mucha gente en la que se consume mucho agua cliente, quizás la opción de comprar el termo eléctrico deba evaluarse.